ARDMADRIZ ofrece amplios y luminosos apartamentos en una ubicación inmejorable, en el mismo centro de la ciudad de Madrid, a veinticinco metros de la Plaza Mayor, junto al Mercado de San Miguel. Desde sus balcones puede contemplarse el Madrid histórico, y su situación, a tan solo 200 metros de la estación de metro SOL y a 150 metros de la estación de metro OPERA, permite disfrutar cómodamente de la amplia oferta cultural, turística y de ocio de la ciudad. Los apartamentos ofrecen todas las facilidades para hacer grata su estancia, como aire acondicionado y climatización, conexión a Internet, mesa de comedor, TV de pantalla plana vía satélite y un espacio para trabajar con un portátil. Cada alojamiento cuenta con un salón-comedor con un amplio sofa-cama, un dormitorio con una cama doble, un espacioso baño privado con ducha, y una cocina totalmente equipada, con nevera, microondas, cafetera, tostador, hervidor de agua y lavadora. El apartamento completo está a disposición de nuestros huéspedes

𝐃𝐨𝐧𝐝𝐞 𝐞𝐬𝐭𝐚𝐦𝐨𝐬: Su inmejorable ubicación, en el corazón del barrio de Ópera, frente a la Plaza Mayor y a tiro de piedra de la Puerta del Sol y el Palacio Real, hacen de esta la mejor opción para quienes quieran aprovechar al máximo su tiempo de estancia en la ciudad, ya sea durante días, semanas o meses. Estos cinco apartamentos son el punto de partida ideal para conocer la ciudad paseando, para disfrutar de su espectacular oferta gastronómica, de sus comercios, de sus museos, de su mítica noche o de los musicales de la Gran Vía, el nuevo “Broadway madrileño”. Pero también son un refugio acogedor y con encanto para descansar después de una jornada de trabajo o un viaje de negocios. Sin duda, su cuidada decoración, en la que conviven elementos de diseño de vanguardia con exquisitas piezas de anticuario, contribuye a que cada estancia respire una personalidad propia y acorde con la de sus huéspedes. 𝐔𝐧 𝐩𝐨𝐜𝐨 𝐝𝐞 𝐡𝐢𝐬𝐭𝐨𝐫𝐢𝐚: La calle de los Milaneses, esquina con la calle Mayor, debe su nombre a dos relojeros milaneses que vinieron a Madrid a mediados del siglo XVI y se establecieron en esta calle. En el mismo local se situó después otro famoso relojero, Ramón Durán, a quién se debe la complicada maquinaria instalada en el convento de San Gil y el reloj de la Puerta del Sol: el de los populares gilitos, llamados así por los madrileños. En esta misma calle también nació Lope de Vega, renombrado poeta y dramaturgo del Siglo de Oro español. En el número 1 de la histórica calle de los Milaneses, un lugar del que ya hablan las crónicas de la capital en el siglo XVII, se levanta el edificio que hoy acoge los apartamentos ArDMadriZ; desde su construcción e inicios, ha tenido una clara vocación de hospedaje, ya que siempre sirvió como servidumbre de regalía de aposento; esta regalía, de origen medieval, consistía en la obligación de ceder la mitad de la propia vivienda para alojar temporalmente a los funcionarios reales.